¡Ya tengo hogar!
Bueno, o algo parecido. Es un pequeño cuarto de 5 tatamis, vamos, 7.65 metros cuadrados. Pero estoy contento. Está muy cerca de la oficina, y aunque no lo buscaba, cerca de la zona de marcha.
También me he comprado moto. Una pequeña scooter, pero que ya me ha hecho pasar vibrantes momentos.
Me ha alcanzado el tiempo hasta para registrarme en la embajada, aunque no podré votar para las elecciones gallegas. Me fastidia, porque contaré como un punto más en la estadística de abstenciones, cuando lo mío debería ser un voto en blanco. Que le vamos a hacer.
Así que poco a cosa la cosa empieza a tirar. Pondré ahora otra entrada corta sobre vuelos, y ya contaré más novedades poco a poco otro día.
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